Un Recuerdo Muy Especial!!!

Un recuerdo Muy Especial !!!

2008 - 13 de octubre - 2016


Recordemos en este Sitio muy especialmente a nuestros hermanos que ya partieron para la "Casa del Padre".

Siempre recordaremos sus sonrisas, el buen humor, "las pescas", "los asados", el amor a Dios y el compromiso constante con el hermano necesitado.

Estamos seguros que desde el Cielo ellos interceden ante Dios por cada uno de nosotros, que caminamos esperanzados en encontranos nuevamente para compartir tantos momentos inolvidables.


... German Merlino, Eldo Yoris y Silvio Bejarano ...

Hasta siempre Hermanos!!!!!


jueves, 9 de mayo de 2013

Jueves ... Día de Comunidad!!!


Hola familia, feliz día de comunidad.

La semana pasada les envié el mensaje de nuestra Madre del Cielo, que desde Medjugorje dirige mensualmente a la humanidad. El último párrafo se reitera desde hace algún tiempo atrás; pide que se rece mucho por los consagrados.

Encontré también una hermosa iniciativa surgida de estos mensajes, que ya comienza a dar frutos de santidad. Se llama: “YO REZO POR UN SACERDOTE”. Lo comparto con uds., no tiene desperdicios.



YO REZO POR UN SACERDOTE


¿Qué es un sacerdote?

Un sacerdote es un hombre, llamado por Dios, que lo ha dejado todo para salvar a gente como tú y como yo.
Conscientes de la soledad en la que hemos abandonando a muchos de nuestros sacerdotes y el sobrepeso de trabajo que soportan muchos de ellos, “Yo rezo por un sacerdote” propone especialmente a los niños y jóvenes, que elijan a un sacerdote y se comprometan a rezar, con el corazón, por él cada día durante un año.
Pediremos al sacerdote que sea él mismo , quien según sus necesidades particulares, formule su petición y se la comunique al niño o joven, para que éste pueda rezar por ello cada día.
Los frutos de esta iniciativa están siendo tan abundantes tanto para los sacerdotes, como para los niños y jóvenes, como para sus familias, que os animamos a seguirla y darla a conocer entre vuestros amigos, colegios, universidades, grupos parroquiales, etc.
Queremos apoyar y ayudar a los sacerdotes de todo el mundo a través de la oración individual y personalizada de los niños y jóvenes que les rodean.
Haz tuya esta causa, imprime gratis las estampas de “Yo rezo por un sacerdote”.



Yo rezo por un sacerdote propone:

1. A los niños y jóvenes que elijan a un sacerdote y recen por él cada día durante todo el año, al final del cual podrán elegir otro si lo creen más necesitado de sus oraciones. Los adultos que lo deseen también pueden unirse a esta iniciativa.
2. Es importante decirle al sacerdote elegido que se va a rezar por él, cada día, durante todo un año. Si el niño es pequeño, los padres se lo comunicarán.
3. El sacerdote deberá pensar qué quiere que el niño o joven le pida a Dios en su nombre concretamente. La petición debe basarse en un anhelo o necesidad personal concreta que le ayude a él en su desinteresada labor de salvar almas. Ejemplo: “que sea un sacerdote santo”,“que Dios le de Su paz”, etc. El sacerdote puede cambiar su petición si cambian sus necesidades o si lo que ha pedido al niño le es concedido.
4. Se rezará en familia, siempre que sea posible. Cada niño, joven y también adulto hará sus peticiones donde cada uno incluirá la petición por su sacerdote. Después, todos juntos rezarán con el corazón, con amor, por todo lo pedido. No olvidéis pedir también por el Papa y agradecer todo aquello que el Señor nos concede.
5. Para que nuestros rezos sean más efectivos, el primer día le pediremos a la Virgen María que sea ella quien eleve siempre nuestras peticiones y oraciones a Dios.


Objetivos

Esta sencilla iniciativa es una humilde respuesta a varias necesidades.
Primer objetivo: cubrir la necesidad que tienen nuestros sacerdotes de que recemos por ellos, por sus necesidades temporales y espirituales. Muchos sacerdotes están sobrecargados y a menudo sin nadie en quien apoyarse. Ésta es una gran oportunidad para acercarnos a ellos y ayudarles.
Segundo objetivo: enseñar a los niños y jóvenes el gran valor que tienen sus oraciones ante Dios y darles una responsabilidad, una razón, que les ayude a rezar con más fervor. Perseverando en la oración con el corazón aprenderán a comunicarse con Dios y verán milagros.
El tercer objetivo es promover la oración en familia. A las gracias espirituales de rezar en familia, se une el beneficio de compartir las preocupaciones y deseos que cada miembro de la familia refleja en sus peticiones particulares antes de la oración.


Frutos

Esta generosa iniciativa, por su fuerza y sencillez, está llamada a dar abundantes frutos y ser una gran fuente de gracias.
1. El niño aprende a comunicarse con Dios diariamente. Dios le escucha y le habla en la oración.
2. Esta responsabilidad hará que el niño o joven entienda que lo que está haciendo es importante. Un sacerdote cuenta con él y con sus oraciones, lo que le ayudará a rezar con más fervor.
3. El sacerdote contará con un gran apoyo espiritual. Un niño o un joven intercediendo perseverantemente ante Dios por sus necesidades. ¡Qué regalo!.
4. Muchas de las cosas que pida serán concedidas, por lo que verá los milagros de la oración, por eso es importante pedir siempre cosas específicas.
5. Se refuerzan o se crean nuevos lazos de amistad con ese sacerdote, absolutamente beneficioso para todos; el niño o joven, la familia, el sacerdote.
Esta amistad es especialmente importante para el joven que contará con la cercanía de un ministro de Cristo en las encrucijadas que le presente la vida.


La petición

Debe ser una necesidad o anhelo, ya sea espiritual o temporal, referente al propio sacerdote para ayudarle a él en su labor única de salvar almas.
Petición de oración del Papa Benedicto XVI en su visita a los niños de la Fundación del Nen Déu en Barcelona el dia 7 de noviembre del 2010:
“Queridos niños y jóvenes, me despido de vosotros dando gracias a Dios por vuestras vidas, tan preciosas a Sus ojos, y asegurándoos que ocupáis un lugar muy importante en el corazón del Papa. Rezo por vosotros todos los días y os ruego que me ayudéis con vuestra oración a cumplir con fidelidad la misión que Cristo me ha encomendado”
Otros ejemplos de peticiones hechas por sacerdotes:
“que sea santo”, “que sea un buen pastor de mi parroquia”, “que mi ministerio dé muchos frutos de conversión”, “para que pueda estudiar mucho este año”, “para que siempre quiera mucho al Señor”, “para que sepa discernir”, “ para que tenga paciencia”, “que sea un buen instrumento para los jóvenes de la parroquia”, “que sea de gran ayuda a los fieles que confieso”, etc.


Así empezó todo

Esta iniciativa es el resultado de la experiencia de una familia, es una iniciativa testada.
Cada noche antes de ir a dormir, la familia se junta alrededor de un crucifijo para rezar. Por orden, los hijos y también los padres hacen sus peticiones a Dios. Después, juntos rezan una parte del Rosario por todo ello. Las peticiones particulares son un buen reflejo de sus preocupaciones, deseos y carencias, lo cual ayuda a todos a ser conscientes de las necesidades de cada miembro de la familia.
Los padres se dieron cuenta del especial fervor con el que rezaban los hijos cuando pedían por una necesidad concreta e importante de los demás. Por ejemplo, por un bebé no nacido al que pronostican problemas, por un amigo de los padres enfermo de cáncer, etc. Los niños pueden entender lo importante que su oración es en estos casos y su oración se vuelve seria y sincera. Los niños son conscientes de realmente estar ayudando a los demás con sus rezos.
Durante el año sacerdotal (2009-2010), los padres tomaron consciencia de la soledad de muchos sacerdotes y tras pedir a la Virgen María poder ayudarlos, decidieron que cada uno eligiría a un sacerdote para rezar por él durante todo el año. Las peticiones de los niños por sus sacerdotes fueron de lo más variadas: “que siempre quiera ser sacerdote”, “que cuando muera vaya al cielo”, etc. Así que la familia decidió que para aprovechar mejor esos rezos, cada uno preguntaría a su sacerdote qué quería que le pidiera a Dios en su nombre. Y así lo hicieron.
Los frutos fueron tan positivos para todos, que tanto los sacerdotes como la familia sintieron la necesidad de transmitirlo a más familias. Desde entonces, las puertas no han dejado de abrirse para difundir esta iniciativa primero entre amigos, después entre grupos de oración, colegios, grupos eclesiales, parroquias, etc…
Nuestra intención e ilusión es apoyar y ayudar a los sacerdotes de todo el mundo a través de la oración individual y personalizada de los cristianos que les rodean, para ello os animamos a hacer vuestra esta causa e imprimir y difundir estas estampas.


Preguntas y respuestas

¿A qué sacerdote elegir?
Al que Dios ponga en tu corazón.
Al que tengas más confianza o por el contrario al que veas más solo. Quizás el que te dió la primera comunión, a tu párroco, al que acaba de salir del seminario,…
Es una buena ocasión para rezar por aquel sacerdote con el que no estás del todo de acuerdo. No lo juzgues. Recuerda que no eres mejor por rezar por él, es tu oración la que es buena.
¿Qué rezar?
La Iglesia recomienda el rezo del Rosario como la oración más querida por la Virgen.
Si el niño es pequeño, quizás es mejor rezar un misterio. Al niño le gusta ser protagonista incluso rezando, si tiene hermanos quizás pueden alternarse para guiarlo. Cuando les toca a ellos empezar las Ave Marías suelen poner más atención e intención.
¿Cuándo empezar?
Hoy mismo.
Comunícale al sacerdote lo antes posible tu decisión de rezar por él, si no lo ves a menudo averigua su teléfono y llámale. Hasta que no te dé una intención particular, reza para que sea santo, todos necesitamos ser más santos.
El sacerdote me ha pedido que rece por el Papa o por las vocaciones.
Dile que rezarás por ello igualmente, pero que con esta iniciativa quieres conseguir de Dios un favor especial que lo ayude a él en particular.
Insiste en que formule una petición que responda a un anhelo o necesidad personal  concreta que le ayude a él en su vocación y en su labor apostólica.
Soy sacerdote, querría que un niño o joven rece por mí, pero no me lo han propuesto
Imprima la iniciativa y désela a conocer a las personas más activas apostólicamente de su parroquia para que la den a conocer en los grupos de catequesis y de familia. Seguro que pronto alguno se le acerca.
O atrévase a pedírselo usted. Elija usted al niño o joven que quiera que rece por usted, explíquele esta iniciativa, dele la libertad de aceptar o no, seguro que se sentirá honrado de ser elegido por usted. Imprima una de nuestras estampas, le será más fácil de explicar.



Testimonios

Padre Juanjo Calles, Diócesis de Salamanca.
Doy gracias a Dios Padre por saberme en Sus manos, cada día, desde que me levanto hasta que me acuesto. Doy gracias a Jesús porque me ha llamado a compartir con Él “los duros trabajos del Evangelio”, (2 Tim 1,8). Doy gracias al Espíritu Santo porque me ha rodeado de una cadena de testigos-orantes que como Moisés en el monte me ayudan, cada día, a combatir contra Amalec, figura del Demonio, y vencerlo si estoy apoyado en la oración: “Sucedió que mientras Moisés tenía alzadas las manos, prevalecía Israel; pero cuando las bajaba, prevalecía Amalec” (Ex 17, 11).
Estoy convencido que detrás de cada sacerdote hay un ejército de hombres y mujeres orantes que sostienen, acompañan, y defienden la labor ministerial y la salud espiritual del presbítero. Saberse arropado y acompañado, cada día en la tarea pastoral, por la oración silenciosa, de intercesión, de tantos ángeles, me ayuda a acometer las tareas ministeriales con renovada esperanza cada jornada.
Soy testigo de la fecundidad y bien espiritual que comporta la oración de intercesión de niños y jóvenes en favor de las intenciones particulares de los sacerdotes. Yo tengo mi orante personal, que reza por mí cada día, que presenta al Padre los proyectos pastorales que llevo en el corazón y que, de forma concreta, comunico a mi confidente orante para que interceda por mí ante el Padre del Cielo. Apoyados en esta invitación de Jesús: “Os aseguro también que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, sea lo que fuere, lo conseguirán de mi Padre que está en los cielos” (Mt 18, 19), los dos, mi joven orante personal y un servidor, unidos en la misma oración, con la misma pasión, hemos podido verificar en estos dos últimos años, cómo las peticiones concretas que hemos presentado al Padre, Él las ha llevado a término.
La oración es un arma poderosa que Dios Padre ha puesto en nuestras manos, que Jesús nos ha enseñado a practicar y que el Espíritu Santo nos susurra cada día como dulce huésped del alma. Sin oración no hay vida espiritual y sin vida espiritual no hay fecundidad ni santidad existencial. Sin oración no hay pasión y sin pasión, sin celo evangelizador, no hay misión. Todo lo contrario, sin oración, sobreviene, en la vida pastoral, la di-misión. La oración lo puede todo, tal y como Jesús nos ha asegurado: “Si tenéis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: ‘Desplázate de aquí allá`, y se desplazaría, y nada os será imposible” (Mt 17, 20).
El ejército de niños y jóvenes que oran en silencio por las intenciones de sus sacerdotes son como el grano de mostaza, apenas es perceptible, pero tiene tal fecundidad que “cuando crece es mayor que las hortalizas, y se hace árbol, hasta el punto de que las aves del cielo vienen y anidan en sus ramas”(Mt 13, 32). Sí, son muchas las aves del cielo, las personas de nuestro entorno, que se están beneficiando de dones espirituales gracias a la oración de intercesión de este ejército de testigos-orantes. Doy gracias, yo también, al Padre por todos ellos y, especialmente, por mi ángel orante.

Mn Salvador Juanola, Diócesis de Girona
Estoy encantado con esta iniciativa. Me ayuda mucho y me anima en mi vocación y ministerio. Es precioso tener colaboradores tan simpáticos y esforzados. Ellos rezan, sus familias también, y realmente su oración se nota.
Además, es como haber ganado una nueva familia. Me siento exigido por su esfuerzo y entrega, pues son muy fieles, y realmente Dios les escucha.
También veo que Dios y la Virgen bendicen lo hogares donde se reza por los sacerdotes. Ellos rezan y rezan de corazón. Aprendo yo a pedir como un niño, y a poner mi vida en manos de Dios por la sencillez de un niño, y por lo tanto, como un niño.
Me ha ayudado a abrir un camino de humildad en mí y a valorar la oración recibida.
Estoy muy agradecido. Gracias a Dios y a todos los que promueven esta iniciativa. También a los 4 niños que rezan por mí.
Bendiciones.

Clara, Sant Cugat del Vallés. 11 años
Todo empezó el día 12 de Octubre de 2010, fiesta de la Virgen del Pilar, cuando mis padres nos explicaron a mis tres hermanos y a mí lo necesitados que están los sacerdotes de ayuda y oración. Nos contaron que una amiga suya había tenido una idea muy importante: que cada niño eligiera a un sacerdote, el que quisiera, para rezar por él y por la intención que éste deseara, y se comprometiera a hacerlo para todo un año. La idea, desde el principio, me pareció genial: seríamos como una especie de ángel de la guarda para el sacerdote, pero en niño; seríamos su “niño de la guarda”.
Todos los hermanos empezamos a pensar en los sacerdotes que conocemos y allí empezó el lío. Queríamos escogerlos a todos, ya que los queremos mucho, por todo el bien que nos hacen y lo mucho que recibimos de ellos.
Al final, nos aclaramos y yo escogí a Mossèn Alfons. Desde el principio, quise con mi oración devolverle toda la ayuda que de él he recibido. Así que lo llamé por teléfono y le expliqué el plan: desde ese día rezaría por él y por la intención que él me pidiera. Él pareció muy contento y me pidió que rezara por una intención muy concreta. Para no olvidarme nunca de la intención, decidí inventarme una oración:
“Señor mío y Dios mío, protege a Mn Alfons y que viva su misión sacerdotal con mucha humildad. También te pido por… (Aquí va la intención de este año que es secreta entre él y yo). Que todo sea según Tu voluntad”.
Cada mañana, en la Santa Misa a la que acudo con mi familia, rezo la oración. En el colegio, al visitar a Jesús en el Sagrario, rezo la oración. Por la noche, lo último que hago antes de ir a dormir, es acudir a los pies de la Cruz y rezar la oración.
Además, cuando rezamos el Rosario en familia, me gusta ofrecer un Misterio por
Mn Alfons y su intención. Mis hermanos hacen lo mismo con su sacerdote.
El pasado 12 de octubre de 2011 hizo un año que había empezado a rezar por Mossèn Alfons, así que lo llamé por teléfono para decirle si quería cambiar de intención. Me dijo que sí y también me dijo que estaba muy contento y agradecido de que me acordara de él.
Yo agradezco a esta amiga de mis padres la idea que tuvo porque creo que todos los niños deberían escoger un sacerdote para ser sus niños de la guarda. Ellos nos bautizaron, nos dan la comunión, nos confiesan y están siempre alegres y dispuestos a ayudarnos. Nosotros tenemos esta manera tan bonita y fácil de devolverles tanto amor.

Mn. Ignasi Condal Elies, Diócesis de Terrassa.
Actualmente hay tres niños que se han comprometido durante un año a rezar cada día por mí. Es una gracia, un milagro, me hace mucho bien saber que no todo depende de mí, que estoy sostenido por la oración, y por el amor de las familias y los niños. Dios nos da un oficio “espantoso” por su dignidad y por su grandeza, necesito pedir cada día la fuerza para cumplirlo.
Me ayuda también a ser más humilde y confiado porque los frutos de mi sacerdocio no dependen sólo de mi oración y esfuerzo y ya no me pertenecen, es una gracia de todos y de la comunión. Veo que los niños son los que acogen mejor el Reino de los cielos, que están muy cerca de Dios, por su sencillez, están abiertos a la fe, saben acoger…
Gracias niños, gracias familias… no dejéis de rezar.









Libro de los Hechos de los Apóstoles 18,1-8.

Pablo dejó Atenas y se fue a Corinto.
Allí se encontró con un judío llamado Aquila, natural del Ponto, que acababa de llegar de Italia con su esposa Priscila, a consecuencia de un decreto del emperador Claudio; porque todos los judíos habían recibido la orden de abandonar Roma. Pablo se acercó a ellos, pues eran del mismo oficio y se dedicaban a fabricar tiendas. Y se quedó a vivir y a trabajar con ellos.
Todos los sábados Pablo entablaba discusiones en la sinagoga, tratando de convencer tanto a los judíos como a los griegos.
Al llegar de Macedonia Silas y Timoteo, Pablo se dedicó por entero a la Palabra, y aseguraba a los judíos que Jesús era el Mesías.
Como se oponían y le respondían con insultos, se sacudió el polvo de sus vestidos mientras les decía: «Nada tengo ya que ver con lo que les suceda; ustedes son los únicos responsables. En adelante me dirigiré a los paganos.»
Pablo cambió de lugar y se fue a la casa de un tal Tito Justo, de los que temen a Dios, que estaba pegada a la sinagoga.
Crispo, uno de los dirigentes de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su familia; y de los corintios que escuchaban a Pablo, muchos creían y se hacían bautizar.


Salmo 98(97),1.2-3ab.3cd-4.

Entonen al Señor un canto nuevo,
pues ha hecho maravillas,
la salvación provino de su diestra,
de su brazo de santidad.

El Señor dio a conocer su salvación,
hizo ver a los paganos su justicia,
se acordó de su amor y fidelidad
en favor de la casa de Israel.

Todos, hasta los confines del mundo,
han visto la salvación de nuestro Dios.
¡Aclamen al Señor, toda la tierra,
estallen en gritos de alegría!



Evangelio según San Juan 16,16-20.

Jesús dijo a sus discípulos: «Dentro de poco ya no me verán, pero después de otro poco me volverán a ver.»
Algunos discípulos se preguntaban: «¿Qué querrá decir con eso: “Dentro de poco ya no me verán y después de otro poco me volverán a ver”? ¿Y qué significa: “Me voy al Padre”?»
Y se preguntaban: «¿A qué se refiere ese “dentro de poco”? No entendemos lo que quiere decir.»
Jesús se dio cuenta de que querían preguntarle y les dijo: «Ustedes andan discutiendo sobre lo que les dije: “Dentro de poco tiempo no me verán y después de otro poco me volverán a ver”.
En verdad les digo que llorarán y se lamentarán, mientras que el mundo se alegrará. Ustedes estarán apenados, pero su tristeza se convertirá en gozo.



Que Dios nos bendiga junto a nuestros seres queridos. Un abrazo y hasta la próxima.

Titino