Un Recuerdo Muy Especial!!!

Un recuerdo Muy Especial !!!

2008 - 13 de octubre - 2016


Recordemos en este Sitio muy especialmente a nuestros hermanos que ya partieron para la "Casa del Padre".

Siempre recordaremos sus sonrisas, el buen humor, "las pescas", "los asados", el amor a Dios y el compromiso constante con el hermano necesitado.

Estamos seguros que desde el Cielo ellos interceden ante Dios por cada uno de nosotros, que caminamos esperanzados en encontranos nuevamente para compartir tantos momentos inolvidables.


... German Merlino, Eldo Yoris y Silvio Bejarano ...

Hasta siempre Hermanos!!!!!


viernes, 27 de diciembre de 2013

Mensaje Urbi et Orbi





Mensaje Urbi et Orbi 
“Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que Dios ama” Lc 2,14). 

Queridos hermanos y hermanas de Roma y del mundo entero, ¡feliz Navidad! Hago mías las palabras del cántico de los ángeles, que se aparecieron a los pastores de Belén la noche de la Navidad. Un cántico que une cielo y tierra, elevando al cielo la alabanza y la gloria y saludando a la tierra de los hombres con el deseo de la paz. 

Los invito a todos a hacer suyo este cántico, que es el de cada hombre y mujer que vigila en la noche, que espera un mundo mejor, que se preocupa de los otros, intentado hacer humildemente su proprio deber. Gloria a Dios. 

A esto nos invita la Navidad en primer lugar: a dar gloria a Dios, porque es bueno, fiel, misericordioso. En este día mi deseo es que todos puedan conocer el verdadero rostro de Dios, el Padre que nos ha dado a Jesús. Me gustaría que todos pudieran sentir a Dios cerca, sentirse en su presencia, que lo amen, que lo adoren. Y que todos nosotros demos gloria a Dios, sobre todo, con la vida, con una vida entregada por amor a Él y a los hermanos. 

Paz a los hombres. La verdadera paz no es un equilibrio de fuerzas opuestas. No es pura “fachada”, que esconde luchas y divisiones. La paz es un compromiso cotidiano, que se logra contando con el don de Dios, con la gracia que nos dio en Jesucristo. 

Viendo al Niño en el Belén, pensemos en los niños que son las víctimas más vulnerables de las guerras, pero pensemos también en los ancianos, en las mujeres maltratadas, en los enfermos… ¡Las guerras destrozan tantas vidas y causan tanto sufrimiento! Demasiadas ha destrozado en los últimos tiempos el conflicto de Siria, generando odios y venganzas. Sigamos rezando al Señor para que el amado pueblo sirio se vea libre de más sufrimientos y las partes en conflicto pongan fin a la violencia y garanticen el acceso a la ayuda humanitaria. Hemos podido comprobar la fuerza de la oración. Y me alegra que hoy se unan a nuestra oración por la paz en Siria creyentes de diversas confesiones religiosas. No perdamos nunca la fuerza de la oración. La fuerza para decir a Dios: Señor, concede tu paz a Siria y al mundo entero. 

Concede la paz a la República Centroafricana, a menudo olvidada por los hombres. Pero tú, Señor, no te olvidas de nadie. Y quieres que reine la paz también en aquella tierra, atormentada por una espiral de violencia y de miseria, donde muchas personas carecen de techo, agua y alimento, sin lo mínimo indispensable para vivir. Que se afiance la concordia en Sudán del Sur, donde las tensiones actuales ya han provocado víctimas y amenazan la pacífica convivencia de este joven Estado. Tú, Príncipe de la paz, convierte el corazón de los violentos, allá donde se encuentren, para que depongan las armas y emprendan el camino del diálogo. Vela por Nigeria, lacerada por continuas violencias que no respetan ni a los inocentes e indefensos. Bendice la tierra que elegiste para venir al mundo y haz que lleguen a feliz término las negociaciones de paz entre israelitas y palestinos. Sana las llagas de la querida tierra de Iraq, azotada todavía por frecuentes atentados. 

Tú, Señor de la vida, protege a cuantos sufren persecución a causa de tu nombre. Alienta y conforta a los desplazados y refugiados, especialmente en el Cuerno de África y en el este de la República Democrática del Congo. Haz que los emigrantes, que buscan una vida digna, encuentren acogida y ayuda. Que no asistamos de nuevo a tragedias como las que hemos visto este año, con los numerosos muertos en Lampedusa. Niño de Belén, toca el corazón de cuantos están involucrados en la trata de seres humanos, para que se den cuenta de la gravedad de este delito contra la humanidad. Dirige tu mirada sobre los niños secuestrados, heridos y asesinados en los conflictos armados, y sobre los que se ven obligados a convertirse en soldados, robándoles su infancia. 

Señor, del cielo y de la tierra, mira a nuestro planeta, que a menudo la codicia y el egoísmo de los hombres explota indiscriminadamente. Asiste y protege a cuantos son víctimas de los desastres naturales, sobre todo al querido pueblo filipino, gravemente afectado por el reciente tifón. 

Queridos hermanos y hermanas, en este mundo, en esta humanidad hoy ha nacido el Salvador, Cristo el Señor. No pasemos de largo ante el Niño de Belén. Dejemos que nuestro corazón se conmueva, se enardezca con la ternura de Dios; necesitamos sus caricias. El amor de Dios es grande; a Él la gloria por los siglos. Dios es nuestra paz: pidámosle que nos ayude a construirla cada día, en nuestra vida, en nuestras familias, en nuestras ciudades y naciones, en el mundo entero. Dejémonos conmover por la bondad de Dios. 

Saludo navideño del papa Francisco 
A todos ustedes, queridos hermanos y hermanas, venidos de todas partes del mundo a esta Plaza, y a cuantos desde distintos países se unen a nosotros a través de los medios de comunicación social, les deseo Feliz Navidad. En este día, iluminado por la esperanza evangélica que proviene de la humilde gruta de Belén, pido para todos ustedes el don navideño de la alegría y de la paz: para los niños y los ancianos, para los jóvenes y las familias, para los pobres y marginados. Que Jesús, que vino a este mundo por nosotros, consuele a los que pasan por la prueba de la enfermedad y el sufrimiento y sostenga a los que se dedican al servicio de los hermanos más necesitados. ¡Feliz Navidad! 

lunes, 23 de diciembre de 2013

Mensaje Navideño del Casante !!!

“L'angelo disse ai Pastori: «Non temete, perché io vi porto la buona notizia di una grande gioia che tutto il popolo avrà: "Oggi, nella città di Davide, è nato per voi un Salvatore, che è il Cristo, il Signore” (Lc 2,10-11)

Carissimi fratelli e sorelle dell’Opera,
            La pace, l’amore e la gioia di Gesù Bambino regnino sempre nei nostri cuori.
La ricorrenza del Natale è una provvidenziale opportunità per mandare a tutti voi il mio affettuoso e fraterno saluto di augurio di un Buon e Santo Natale.
Il Natale è la festa dell’Amore e della gioia, è l’espressione dell’amore infinito di Dio verso l’uomo che nell’incarnazione di Gesù ci offre la gioia della salvezza. Questo grande mistero di amore non può essere custodito solo nei nostri cuori, dobbiamo comunicarlo, annunciarlo e trasmetterlo a tutti con una gioia profonda, quella gioia che nessuno può toglierci.
Ricordo le parole di Papa Francesco nella sua ultima esortazione apostolica “Evangelii Gaudium”: “la gioia del vangelo riempie il cuore e la vita intera di coloro che si incontrano con Gesù. Coloro che si lasciano salvare da Lui sono liberati dal peccato, dalla tristezza, dal vuoto interiore, dall’isolamento. Con Gesù Cristo sempre nasce e rinasce la gioia … Il grande rischio del mondo attuale, con la sua molteplice ed opprimente offerta di consumo, è una tristezza individualista che scaturisce dal cuore comodo e avaro, dalla ricerca malata di piaceri superficiali, dalla coscienza isolata … Invito ogni cristiano, in qualsiasi luogo e situazione si trovi, a rinnovare oggi stesso il suo incontro personale con Gesù Cristo o, almeno, a prendere la decisione di lasciarsi incontrare da Lui, di cercarlo ogni giorno senza sosta”.
La gioia dell’incontro con Cristo trasforma e dà significato alla nostra vita e la rende sempre più aperta agli altri in una spontanea comunicazione e trasmissione della gioia che scaturisce dal cuore nel modo in cui l’ha vissuta don Calabria.
Lo spirito del mondo, invece, entra nei nostri cuori con grande facilità, ci impedisce di vivere la gioia piena e ci toglie il fervore evangelico per vivere il godimento ingannevole di un autocompiacimento egocentrico. Da queste forme riduttive di vita cristiana e religiosa non può scaturire un autentico dinamismo evangelizzatore!
Che questo Natale sia per noi un invito concreto come quello che hanno ricevuto i pastori a Betlemme: “Oggi, nella città di Davide, è nato per voi un Salvatore, che è il Cristo, il Signore”.
Usciamo! Usciamo ad offrire a tutti la vita di Gesù Cristo e il suo amore!
È un invito per ogni cristiano, sacerdote, religioso di tutti i tempi e nelle diverse situazioni della vita di aprire le porte a Cristo e accogliere la gioia del Vangelo per annunciarlo.
La nostra missione come Poveri Servi, la missione che il Signore ha affidato a ciascuno di noi, è e deve essere prima di tutto quella di trasmettere la gioia dell’incontro con Cristo rimanendo accanto e vicini alle persone più povere o nelle diverse situazioni di disagio dell’umanità.
Evangelizzare è portare la Buona Novella di Cristo; è umanizzare. Quando annunziamo il vangelo umanizziamo perché la persona può incontrare il senso della propria vita. Quando umanizziamo nel servizio concreto al prossimo con i valori del vangelo, facciamo un'opera di evangelizzazione. Questo lo ricordano l’incarnazione di Gesù e la sua venuta su questo mondo perché tutti abbiamo la vita e la vita in pienezza. Per questo l’incontro con Cristo trasforma la nostra vita e ci rendi simili a Lui. Questo è il senso profondo del Natale.
Ricordo in modo particolare di continuare il nostro impegno con la preghiera per la preparazione alla celebrazione dell’XI Capitolo Generale il cui tema ci porta a riflettere sullo stile e radicalità Calabriana per una vera Apostolica Vivendi Forma. Accompagniamo questo periodo con un’autentica preghiera allo Spirito Santo perché ci indichi le strade per una vera riforma della nostra vita e dell’Opera per essere segni e profezia per il mondo di oggi.
Donaci Signore lo sguardo del tuo amore perché con la pienezza del Tuo amore, della Tua gioia e dello zelo apostolico possiamo vivere la radicalità evangelica del Carisma Calabriano nel mondo.
Che la nascita di Gesù porti a tutti noi una gioia profonda e che nell’umiltà e nel servizio concreto di ogni giorno possiamo portarla al cuore dell’umanità. Auguro tutti un Buon e Santo Natale.
            Vi benedico e ricordo nelle mie preghiere con grande affetto. Pregate per me.

P. Miguel Tofful

miércoles, 4 de diciembre de 2013

Un día como hoy!!!



Un día como hoy, 04 de diciembre, pero de 1954 el Padre Juan Calabria partía hacia la Casa del Padre; e igualmente un 4 de diciembre pero de 1937, uno de sus fieles colaboradores, el Hermano Francisco Perez,  se le había adelantado y también había partido hacia el Cielo.
Cuanto amor, cuanta donación de si mismo, cuanto ejemplo .... que nos han dejado estos Apóstoles del Siglo XX !!!!
Demos gracias a Dios por sus vidas y sus ejemplos y que el Señor nos continúe bendiciendo a través de su intersección.